Bosco Global dinamiza un taller de ecociencia y ecoconciencia con el alumnado de la Facultad de Geografía e Historia.
Las universidades son centros de aprendizaje e investigación, puntas de lanza del conocimiento académico, pero cada vez más, desde sus docentes y alumnado, se viene impulsando una visión más comprometida con la sociedad de estas instituciones.
Un ejemplo lo hemos tenido en la Facultad de Geografía e Historia de la Universidad de Sevilla, donde han puesto en marcha un proyecto de innovación para la implementación de un compromiso activo con los ODS de la Agenda 2030 desde las aulas de la Educación Superior.
«Desde Bosco Global hemos tenido el honor de ser la primera de las entidades sociales que ha pasado por esta iniciativa, que busca convertir a los y las jóvenes en agentes del cambio por un mundo en paz, más sostenible y justo», explica Victoriano Márquez, técnico de educación de Bosco Global que dinamizó el taller.
El tema que se llevó al aula de la antigua Fábrica de Tabacos el pasado 20 de septiembre fue «Dime, Madre Tierra – taller de ecociencia y ecoconciencia», en el que se les propuso el reto de realizar, en una mañana, una experiencia de Aprendizaje-Servicio a través de la metodología «Design for Change» partiendo de los materiales y contenidos del proyecto homónimo que Bosco Global está desarrollando entre centros educativos de Andalucía y Cochabamba (Bolivia).
«Así, pasamos por la fase de «Sentir», donde realizaron un breakout digital donde pudieron conocer a los Guardianes de La Pachamama y debatir sobre el Cambio Climático, sus consecuencias e implicancias ambientales, sociales y económicas a nivel local y global. A partir de ahí, siguieron las siguientes fases del proyecto: imaginando soluciones, actuando para crear una acción de impacto de sensibilización que sirva para combatir la desinformación o infoxicación sobre este reto planetario y compartiéndolo a través de sus redes. Aquí os dejamos, a modo de ejemplo, dos temas musicales creados para crear ecoconciencia entre los más jóvenes. Tenemos «Causas del Cambio Climático», creado por las docentes participantes en el proyecto y «El Calor Asfixiante», surgido del talento del alumnado de diversos cursos de Geografía», añade Victoriano.
«Sin embargo, el verdadero éxito de la actividad no fueron estas canciones o los diseños de posibles campañas de concienciación, sino el compromiso activo e implicación de los y las jóvenes participantes, su empatía y solidaridad hacia un problema del que a veces se olvida la cara más humana. Ellos y ellas serán las personas, científicas e investigadoras, que habrán de asumir la titánica tarea de mitigar o retrasar las consecuencias del Cambio Climático o ayudar a la sociedad a adaptarse a dicho panorama. Pero para hacerlo necesitan del apoyo, en gestos y en hábitos más sostenibles, de la sociedad en su conjunto; como declaraba una de las asistentes al taller sobre los distintos aspectos que han de divulgarse desde la ciencia en este tema: «son las claves para, que entre todos, podamos frenar este fenómeno»» concluye Victoriano.
«Dime, Madre Tierra», es un proyecto de Educación para el Desarrollo financiado por la Agencia Andaluza de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AACID) de la Junta de Andalucía.
